Mensaje del presidente de la WKB, Kancho Pedro Roiz

2622

Queridos Shihan, Sensei, Senpai,
Quisiera felicitarlos a todos por el entusiasmo que habéis mostrado durante este año 2020. Un año que nos ha dejado grandes cicatrices por la pérdida de seres queridos, amigos y conocidos.

Comenzamos el 2021 con la misma incertidumbre con la que terminamos este año pero con la firme esperanza de que estamos ante el “principio del fin”.

Durante este año hemos podido observar como cada país y cada dojo realizaba actividades en la medida de lo que les permitían y nos hacían llegar el entusiasmo por seguir hacia delante demostrando su ilusión y energía ante las adversidades.

Empezar 2021 con fuerza es algo que caracteriza a esta familia. Estamos formados a base de dificultades y retos que son imposibles para muchas personas, culminándolos gracias a nuestro espíritu del “OSU”.

La palabra “OSU”, como algunos de vosotros ya sabréis, proviene de los antiguos pescadores de Japón quienes remaban a contracorriente ante las adversas condiciones que el mar les imponía. De este modo, juntos alzaban ese “OSU” en cada remada resistiendo con valentía, adquiriendo esta palabra las cualidades de resistencia y aguante para no rendirse ante nada. Por este motivo, en Kyokushin, es tan importante la palabra “OSU”, utilizándola en nuestros entrenamientos cada día.

A pesar de las adversidades que nos ha presentado este año, WKB ha seguido creciendo incluyendo a grandes maestros y personas entre nuestras filas, que nos seguirán aportando historia y experiencia para seguir enriqueciendo a todos y cada uno de nuestros miembros.
Muchos me conocéis y sabéis que la ilusión por esta organización es la de tener un lugar donde cada uno de nosotros aportemos nuestro granito de arena y así seguir alimentando esta sed por aprender que tanto nos caracteriza.

Sin duda alguna, el lema para este nuevo año es “Estudiar el pasado y abrirse al futuro”.
Durante estos años viajando por el mundo me han servido para recopilar la historia de las raíces del karate y del kyokushin, aprendiendo a ver el mundo de manera diferente. Siempre hay cosas que te ilusionan y otras que te decepcionan de la historia, pero todas estas cosas le dan sentido a lo que hacemos, más allá de los golpes y las infinitas repeticiones de técnicas. La búsqueda y la innovación es lo que le da sentido a esta gran familia que hemos formado, el aprendizaje común entre maestros y alumnos. Este “saber sin distinciones” valorando la idea y el conocimiento es lo que nos hará crecer, siendo honestos con nosotros mismos y con nuestros alumnos.

Una vez me preguntaron que era el Karate y yo les dije: “Karate son sensaciones, sin sensaciones el Karate es como una cascara vacía”.

No me gustaría despedirme sin agradeceros toda la confianza que depositáis en mí cada día.

Feliz año nuevo a todos, OSU!!.
Kancho Pedro Roiz